Confesiones de una emprendedora novata
Impresiones y experiencias del año 2022
El año 2022 ha sido sinuoso, como mínimo. Y realmente, me apetece compartir algunas de las experiencias que he vivido, llevando adelante mi emprendimiento Migrantoria.
Aunque ahora mismo estoy muy feliz e ilusionada con el siguiente año, durante el 2022 no siempre fue así.
Nuestros emprendimientos son una extensión de nosotras mismas. Por ello, lo que nos pasa influye e impacta en esta obra nuestra. Esto fue así para mí desde octubre 2021, cuando situaciones familiares en Argentina requirieron mi tiempo, presencia y esfuerzo económico. Migrantoria, que es mi fuente de recursos- vamos, mi trabajo- se vió afectada. Desde lo emocional hasta la dedicación que podía darle.
Esto se manifestó entre junio y septiembre, que fue el período más bajo de facturación y me encontró en una situación no prevista. Compañeras: debemos ser previsoras para los períodos más llanos de ingresos. Esto yo no pude verlo claro con tanta movilización en el comienzo del año, pero así es. Lección aprendida.
Esa experiencia, junto con la debacle económica como consecuencia de la entrada en guerra en Ucrania (¡apenas saliendo de una Pandemia Mundial!), me asustaron bastante. La inflación nos impactó negativamente, haciendo revivir miedos (recuerden que vengo de Argentina, donde la hiperinflación es tan conocida y sufrida…) que me pusieron en alerta.
¿Y qué puedo hacer yo, con un proyecto en crecimiento en mis manos? Seguir adelante. Buscar apoyos, mejorar los servicios, darme a conocer…y confiar en la Vida (con V mayúscula), con esperanza de que todo irá encontrando su cauce.
Surgió Presstatzen un espacio de aprendizaje rotundo (¡Migrantoria es una empresa de la economía social!); busqué colaboradoras, otras se acercaron “espontáneamente”. Algunas personas me dieron oportunidades, se abrieron puertas. Pedí subvenciones a la administración, que fueron un apoyo.
Activé mi mirada al entorno, descubrí nuevas necesidades que podemos atender desde Migrantoria, hice propuestas…confié en mi criterio, y seguimos avanzando.
Otras cuestiones del entorno también me están afectando. Aún así, creo que puedo seguir adelante si considero a este proyecto como un proyecto colectivo, donde mucha gente está aportando desde diferentes lugares. Por ello, mi agradecimiento a todas las personas que de una manera u otra han contribuido para que haya llegado hasta aquí, con su confianza, su apoyo y que me animan a continuar con ilusión.
Me considero una superviviente de este sistema capitalista y patriarcal. Es bastante jodido moverte dentro de él cuando se tienen otros valores. Es muy importante recordar que no estamos solas. Hay muuuuucha gente implicada en aportar para una sociedad más justa. Apoyémonos, para que las curvas y amenazas que vendrán, nos encuentren formando redes que nos hacen más resistentes.
Bienvenidas a la siembra y la cosecha de 2023.